Si tomamos una pausa y analizamos los momentos en nuestras vidas en los que nos estamos comunicando con alguien para realmente escuchar, ¿qué escuchamos?
Pasamos una cantidad excesiva de tiempo hablando sobre todo lo que está mal en nuestras vidas. Todo lo que no nos sirve. ¿Por qué?
Nos atascamos en esta historia que seguimos diciéndonos, la que corremos para compartir con otras personas, estamos atrapados hablando repetidamente de algo que no es donde queremos estar ni quienes queremos ser ni lo que queremos para nuestras vidas… ¿Por qué no pasamos esta misma cantidad de tiempo hablando sobre en quién queremos convertirnos, dónde queremos estar, qué queremos para nuestras vidas, nuestras metas, nuestros sueños, qué hace que nuestro corazón se sienta lleno? ¿Por qué no divagar sobre todo lo bueno que esta en nuestras vidas, todo lo que nos sirve?
¡LA FORMA EN QUE ESTAMOS DESCRIBIENDO NUESTRA VIDA ES LA MANERA EN QUE SE MANIFIESTA! y a lo que sea que le demos energía, también le damos vida.
Tenemos que ser capaces de reconocer este patrón, de ninguna manera hablar sobre las cosas que nos hacen sentir derrotados soluciona el problema, solo sigue aumentando este sentimiento y alimentándolo con energía. Una vez, háblalo y sácalo de tu sistema, grita, canta, escríbelo, llora, como sea que te funcione pero no te quedes enganchado de lo negativo porque terminamos regalando nuestro poder, siendo controlados por cosas externas, nos convertimos en prisioneros de las circunstancias, las personas, el clima, nuestro trabajo, tenemos que recuperar nuestro poder porque adivina qué, ¡NOSOTROS TENEMOS EL CONTROL! Es nuestra responsabilidad sentirnos bien, las cosas suceden, a veces cosas que deseamos que fueran diferentes, y a veces sentimos que nuestro mundo se desborona frente a nosotros, pero PODEMOS ELEGIR cómo reaccionar ante esto y cómo canalizar esto en un forma que nos sirve en lugar de auto sabotearnos.
Si pasamos por la vida dejando que cada pequeña cosa que sucede nos haga sentir mal, y luego nos apresuramos a compartir lo que salió mal y repetirlo con todos en nuestra vida, nunca nos sentiremos bien; siempre habrá algo !! De ninguna manera estamos obligados a darle una reacción a todo, las cosas simplemente suceden y luego NOSOTROS las etiquetamos como buenas o malas.
Yo también soy culpable de esto, no soy perfecta y aprendo todos los días. He estado practicando conscientemente hablar de mi vida de una manera que me permite salir de la trampa de estar en un ciclo negativo y DETENER el auto sabotaje.
Con mi familia, cuando hablo con mis amigos, no me apresuro a listar las cosas que no van tan bien, en vez, elegir hablar sobre nuestros objetivos, lo que aspiramos a lograr, los libros que estamos leyendo, las cosas que amamos y por qué, en lugar de nuestras preocupaciones, haciendo que las conversaciones vengan de un lugar de amor en vez de un lugar de miedo. Esto afirma las cosas que nos sirven, rompe el ciclo de negatividad Y tenemos conversaciones significativas en lugar de conversaciones que agotan la energía.
Las cosas no pueden ser buenas o malas, las cosas simplemente son, y nosotros decidimos cómo referirnos a ellas y cómo aferrarnos emocionalmente. Pero las cosas simplemente son, y todo lo que nos pasa es lo que necesitábamos para crecer y evolucionar, de lo contrario no hubiese sucedido. Cada experiencia que vivimos, nosotros, como individuos, necesitábamos para crecer, evolucionar, aprender, no es una coincidencia, no es el resultado de una elección correcta o incorrecta, sino exactamente lo que necesitábamos en ese momento.
Las personas solo pueden sentir, pensar y actuar en su propio nivel de conciencia, cuando alguien hace algo, o cuando no lo hace, es un reflejo de su nivel de conciencia en ese momento. A veces miramos hacia atrás en nuestras vidas y deseamos haber hecho algunas cosas de manera diferente. Podemos tener este pensamiento porque ahora estamos en un nivel de conciencia diferente y más alto que antes. Hacemos lo mejor que podemos con lo que sabemos. Esta es nuestra evolución, y es diferente para todos, y así es como a menudo llegamos a superar lugares, personas, ideas y cosas; porque hemos alcanzado un nuevo nivel de ser.
Lo bueno es que ahora si entendemos esto y si quieres mirar tu futuro solo mira quién eres hoy, cómo pasas tu tiempo, qué piensas, qué dices, con quién te rodeas, qué miras, qué lees y cómo te hablas a ti mismo.
Ahora, nuestro nivel de conciencia no se eleva mágicamente y sube de nivel, tenemos que ponernos a trabajar y la mayoría de nosotros vivimos en el pasado y hemos creado una resistencia a vivir en el futuro. Esto se debe a que nuestros hábitos están anclados en nuestro cuerpo y en nuestra mente y emocionalmente nos apegamos a nuestras experiencias pasadas, incluso si fueron negativas y seguimos fortaleciendo esto cuando divagamos y terminamos en un circulo. No podemos pensar, actuar y sentir de la misma manera que siempre lo hemos hecho, pero esperar que suceda un resultado diferente en nuestra vida.
¡NO PODEMOS CONTINUAR HACIENDO LO MISMO QUE SIEMPRE HEMOS HECHO PERO ESPERAR UN RESULTADO DIFERENTE!
Depende completamente de lo que hagamos hoy, dónde estaremos en el futuro cercano. ¿Que estamos pensando? ¿Que estamos diciendo? ¿Que estamos haciendo? ¡Estos tienen que ser diferentes a lo que estamos acostumbrados! Necesitamos nuevos hábitos, nuevas rutinas, cosas que nos sirvan.
Tenemos que detener el ciclo o no seremos libres de vivir la vida a su potencial, sino que viviremos la vida a nuestro potencial, dictado por nuestro nivel de conciencia.
En vez de ser rápidos para listar todo aquello que esta ‘mal’, seamos rápidos para listar todo lo que nos hace bien.
Entonces, ¿qué vamos a cambiar hoy?
Siempre con amor,
Valeria